El segundo, la librería Nueva Altamira. Es un sitio más solemne y silencioso, con un aire más de biblioteca. Es un lugar para obtener inspiración en otro tipo de literatura. Si Catalonia se caracteriza por la urgencia, Altamira hace una curatoría a partir de la trascendencia. Se trata de otro enfoque, más dado hacia las huellas que deja la literatura (particularmente, ficción y poesía) en la cultura.

En dicha librería, puedes acceder a una dimensión muy bien afinada del concepto «literatura universal»: está abastecida de grandes autores, grandes obras o incluso pequeñas joyas olvidadas: Altamira ofrece catálogo para entender la literatura como un espacio donde se ubican los mejores instantes de imaginación de los autores, rescatándolos y poniéndoles un lugar.